El trabajo es casi artesanal, uno por uno, el fruto maduro es arrancado del árbol con mucho cuidado.
En una hacienda en Ribeirao Braco (Brasil) al suroeste de Sao Paulo, los trabajadores hacen la cosecha de los casi 10 mil pies de kiwi orgánico.
El dueño de la hacienda decidió apostar por el cultivo durante casi ocho años. En la cosecha pasada se recogieron casi 10 toneladas, este año, la expectativa es llegar a 40 toneladas.
El kiwi cultivado por el productor es de la variedad conocida como “gota de miel”, una variedad más pequeña que tiene el fruto amarillo.
Toda la producción se comercializa a una cooperativa de Itapeva a R$ 3,50. En tres años, el productor pretende duplicar el número de plantas cultivadas con un ojo puesto en el mercado internacional.
El grueso de la producción brasileña de kiwi está concentrado en los tres estados del Sur que en conjunto representan el 95% de la cosecha nacional.
Fuente: G1
Fecha de publicación: 29/06/2012